Hacer deporte antes, durante o después de la jornada laboral tiene muchos beneficios para nuestra salud y es una excelente forma de prevenir el agotamiento físico y mental.
El ejercicio mejora el estado físico general -sobretodo en personas con trabajos sedentarios, en oficinas, sentados delante del ordenador toda la jornada- y eso tiene un impacto directo en la capacidad y rendimiento en el trabajo.
No hace falta hacer largas y duras sesiones de entrenamiento. Con dedicar 20 o 30 minutos al día es suficiente, ya sea en el gimnasio, saliendo a correr o a andar a un ritmo rápido, o haciendo ejercicios de fuerza en casa, por ejemplo. Y, en el trabajo, una buena práctica es intentar movernos lo máximo posible durante el día. Subir las escaleras en lugar de coger el ascensor, o ir a hablar con los compañeros en lugar de llamar o enviar emails. Estos pequeños cambios nos ayudarán a sentirnos más ágiles y productivos.
El deporte ayuda a canalizar la energía y, a la vez, aumenta la concentración y la capacidad para resolver problemas. Hacer deporte aumenta la productividad en el trabajo porque despeja la mente de las preocupaciones diarias, libera tensiones, reduce el estrés y mejora nuestra salud y calidad de vida. Además, nos ayuda a dormir y descansar mejor. Y descansando mejor, las jornadas de trabajo son mucho más llevaderas.
El wellness empresarial no debería ser una moda pasajera. Es importante que nos preocupemos por la salud física y mental de nuestros empleados y fomentar los buenos hábitos y el ejercicio físico porque aporta beneficios para todos. En SC Trade Center hemos dado un paso adelante y hemos firmado un acuerdo con los centros DiR gracias al que nuestros empleados o clientes del centro de negocios pueden disfrutar de condiciones inmejorables para empezar a cuidar su salud. ¡Ya no hay excusas!
